Es así que el Senador Maxime Roumer, del departamento Grand’Anse al suroeste de Haití, quien siente a Cuba como su segunda patria, hizo llegar una copia de una misiva redactada recientemente, dirigida al presidente estadounidense Barack Obama, en la que solicita al mandatario autorice a René González, uno de nuestro Cinco Héroes, visitar a su hermano Roberto, aquejado de cáncer.
“Presidente Obama, no se deje invadir por el odio y la venganza de extremistas cubano-americanos, la justicia supone superar presiones partidistas y rechazar infligir una doble pena a quien, más allá de consideraciones ideológicas, merece humana consideración. Usted es el primer presidente negro de la mayor potencia de la historia de la humanidad, la responsabilidad y las expectativas son aún mayores; esperamos que sea digno Rey Salomón y que el sufrimiento causado al pueblo cubano termine”.
Esta carta del Senador haitiano Maxime Roumer, junto a las innumerables acciones nacidas de todos los rincones del orbe reafirmando al apoyo incondicional a estos Cinco símbolos de lealtad, son una prueba de que aún es posible confiar en el mejoramiento humano y que contra el odio y la infamia se levantan miles de voces de amor, solidaridad y esperanza. (CubaMinrex-EmbaCuba Haití)
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