Por Félix Manuel Calvo Araújo. Decir Fidel es pensar en pruebas, adversidades y victorias. Su nombre ha entrado a la historia mundial por haber convertido en potencia moral a un pequeño país de apenas 110 922 kilómetros cuadrados. Mencionar su nombre es pensar en voluntad férrea, en carácter indoblegable e inteligencia profunda; su defensa de los países en desarrollo, lo han hecho líder de los humildes, de los que añoran y creen en que un mundo mejor, de paz,
sí es posible.
Leer más de esta entrada
No hay comentarios:
Publicar un comentario