COMITÉ ARGENTINO POR LA LIBERTAD DE LOS 5. Sumate a la lucha para acabar con esta injusticia.
sábado, 28 de diciembre de 2013
jueves, 26 de diciembre de 2013
Mandela y el homenaje de Gerardo
De Cubadebate:
http://www.cubadebate.cu/opinion/2013/12/25/mandela-y-el-homenaje-de-gerardo/
Gerardo, entre otras privaciones, sufre duras limitaciones para comunicarse con el mundo exterior. La correspondencia postal suele demorársele semanas enteras, incluso meses, como consecuencia de la censura que obliga a sus carceleros a revisar cuidadosamente cada palabra suya o destinada a él.
http://www.cubadebate.cu/opinion/2013/12/25/mandela-y-el-homenaje-de-gerardo/
25 DICIEMBRE 2013
Gerardo Hernández Nordelo, secuestrado en la prisión federal de máxima seguridad de Victorville, en el desierto de California, supo de la muerte de Nelson Mandela y sintió la necesidad de rendirle homenaje, hacer algo que, para él, representaba un esfuerzo extraordinario, una proeza más de las muchas que colman su existencia cotidiana.
Gerardo Hernández, al centro, mientras cumplía misión internacionalista en Angola |
Su acceso al correo electrónico es sumamente restringido para conectarse con Adriana su esposa, con Martin Garbus, su abogado y con un funcionario consular. Queda el teléfono para el que dispone de 300 minutos al mes los cuales debe emplear para hablar con Garbus y discutir los muy complejos documentos y trámites de su última apelación legal, o con la misión diplomática cubana y con Adriana a la que Washington no le otorga el visado para que pueda visitarlo normalmente haciendo de él el único prisionero en Estados Unidos a quien se le prohíbe ese “privilegio”.
Así han sido las condiciones “normales” en las que Gerardo ha pasado los últimos quince años desde que lo apresaron cuando era aun muy joven.
Pero Victorville no es un lugar cualquiera. Son frecuentes las riñas y los estallidos de violencia y cada vez que estos suceden las autoridades tienen que tomar medidas drásticas tales como imponer el “lock down”, o sea, encerrar a los presos en sus celdas. En esas circunstancias no hay correspondencia ni teléfono. El aislamiento, entonces, es total.
Un grave incidente en el que murió uno de los presos ocurrió el trece de noviembre y provocó la imposición del “lock down” por el resto del mes. Ya en diciembre, poco a poco, se fueron restableciendo las prácticas carcelarias habituales y los recluidos pudieron recuperar progresivamente sus muy escasos contactos con el exterior. Cuando se les permitió hacerlo, los reclusos hacían larga fila ante el único teléfono disponible para una rápida llamada.
Pasarían por su mente momentos decisivos de la nueva y riesgosa misión, que, también voluntariamente, habría de cumplir poco después coordinando la labor de otros jóvenes que fueron a Miami a combatir al terrorismo en su propia madriguera. Esta vez debería luchar sin armas y descubrir los planes de las bandas criminales más violentas, los mismos que vociferaban su odio contra Mandela y lo amenazaron y hostigaron cuando, en junio de 1990, los obreros afroamericanos quisieron honrar al luchador antirracista.
Pensaría siempre en aquella foto de Mandela que tres lustros atrás, al ser apresado, Gerardo guardó celosamente, única y fiel compañera en aquel calabozo de castigo en el cual pasó los primeros diecisiete meses de su injusto y prolongado cautiverio.
En cuanto pudo hacerlo se acercó al grupo que rodeaba el teléfono. Disponía de muy poco tiempo. Sin vacilar, envió este mensaje:
“Quienes dedican ilimitados recursos a borrar y reescribir la historia, y lo tuvieron en sus listas de ‹‹peligrosos terroristas››, hoy sufrirán de amnesia colectiva.
Quienes lo agraviaron negándole un homenaje en la Ciudad de Miami, por abrazar a Fidel y agradecer la ayuda de Cuba a África, hoy tendrán que callar avergonzados.
Los Cinco seguiremos enfrentando cada día la injusta prisión -hasta el final- inspirados en su ejemplo de lealtad y resistencia.
¡Gloria eterna al gran Nelson Mandela!
Gerardo Hernández Nordelo
Prisión Federal de Victorville
California. Diciembre 5 de 2013”
Gerardo Hernández Nordelo
Prisión Federal de Victorville
California. Diciembre 5 de 2013”
Regresó a la celda con la satisfacción del deber cumplido. Afuera, los fabricantes de amnesia inundaban al mundo con visiones empalagosas, falsas, destinadas a borrar la verdad de la lucha contra el apartheid y la vida heroica de Mandela. Para Gerardo la lucha continúa.
La Habana diciembre 24, 2013
PS: Desde el 21 de diciembre Victorville está otra vez en “lock down”.
miércoles, 25 de diciembre de 2013
Familia de Los Cinco en Navidad
Desde hace 15 años, en las Fiestas de Navidad y Fin de Año, las familias siguen injustamente separadas.
Recibido de :
Comité Internacional y de Jóvenes agramontinos por los Cinco.
http://www.youtube.com/watch? v=IE-2R0_GTyE&feature=youtu.be
Recibido de :
Comité Internacional y de Jóvenes agramontinos por los Cinco.
Envían familiares de los Cinco mensaje navideño al pueblo de EEUU
“Esta es la Navidad número 15 sin mi papá”, dice Lizbeth, la hija de Ramón Labañino, en un mensaje navideño que se ha filtrado a través de las red social Youtube.
Cubadebate comparte con sus lectores el video en el que se escucha a Lizbeth Labañino hablando en inglés:
“It is Christmas time. It is a beautiful family moment.. Christmas is a great tradition for happiness and reunion. This is my 15th Christmas without my dad, hope will be the last one.”“Es tiempo de Navidad. Es un lindo momento familiar. La Navidad es una gran tradición para la felicidad y el encuentro. Esta es mi Navidad número 15 sin mi papá, espero que sea la última.”
Ramón Labañino es uno de los Cinco héroes cubanos condenados a largas penas por defender a su país de las acciones terroristas organizadas desde territorio norteamericano. Cuatro de ellos, incluido Ramón, siguen presos, como Gerardo Hernández, Antonio Guerrero y Fernándo González. René González recién regresó a la Isla después de una condena de 15 años.
http://www.youtube.com/watch?
viernes, 20 de diciembre de 2013
Carta de Fidel - Mandela ha muerto - La verdad del Apartheid
¿Por qué ocultar la verdad sobre el Apartheid?
Quizás el imperio creyó que nuestro pueblo no haría honor a su palabra cuando, en días inciertos del pasado siglo, afirmamos que si incluso la URSS desaparecía Cuba seguiría luchando.
La Segunda Guerra Mundial estalló cuando, el 1ro de septiembre de 1939, el nazi-fascismo invadió Polonia y cayó como un rayo sobre el pueblo heroico de la URSS, que aportó 27 millones de vidas para preservar a la humanidad de aquella brutal matanza que puso fin a la vida de más de 50 millones de personas.
La guerra es, por otro lado, la única actividad a lo largo de la historia que el género humano nunca ha sido capaz de evitar; lo que llevó a Einstein a responder que no sabía cómo sería la Tercera Guerra Mundial, pero la Cuarta sería con palos y piedras.
Sumados los medios disponibles por las dos más poderosas potencias, Estados Unidos y Rusia, disponen de más de 20 000 veinte mil ojivas nucleares. La humanidad debiera conocer bien que, tres días después de la asunción de John F. Kennedy a la presidencia de su país, el 20 de enero de 1961, un bombardero B-52 de Estados Unidos, en vuelo de rutina, que transportaba dos bombas atómicas con una capacidad destructiva 260 veces superior a la utilizada en Hiroshima, sufrió un accidente que precipitó el aparato hacia tierra. En tales casos, equipos automáticos sofisticados aplican medidas que impiden el estallido de las bombas. La primera cayó a tierra sin riesgo alguno; la segunda, de los 4 mecanismos, tres fallaron, y el cuarto, en estado crítico, apenas funcionó; la bomba por puro azar no estalló.
Ningún acontecimiento presente o pasado que yo recuerde o haya oído mencionar, como la muerte de Mandela, impactó tanto a la opinión pública mundial; y no por sus riquezas, sino por la calidad humana y la nobleza de sus sentimientos e ideas.
A lo largo de la historia, hasta hace apenas un siglo y medio, y antes de que las máquinas y robots, a un costo mínimo de energías, se ocuparan de nuestras modestas tareas, no existían ninguno de los fenómenos que hoy conmueven a la humanidad y rigen inexorablemente a cada una de las personas: hombres o mujeres, niños y ancianos, jóvenes y adultos, agricultores y obreros fabriles, manuales o intelectuales. La tendencia dominante es la de instalarse en las ciudades, donde la creación de empleos, transporte y condiciones elementales de vida, demandan enormes inversiones en detrimento de la producción alimentaria y otras formas de vida más razonables.
Tres potencias han hecho descender artefactos en la Luna de nuestro planeta. El mismo día en que Nelson Mandela, envuelto en la bandera de su patria, fue inhumado en el patio de la humilde casa donde nació hace 95 años, un módulo sofisticado de la República Popular China descendía en un espacio iluminado de nuestra Luna. La coincidencia de ambos hechos fue absolutamente casual.
Millones de científicos investigan materias y radiaciones en la Tierra y el espacio; por ellos se conoce que Titán, una de las lunas de Saturno, acumuló 40 cuarenta veces más petróleo que el existente en nuestro planeta cuando comenzó la explotación de este hace apenas 125 años, y al ritmo actual de consumo durará apenas un siglo más.
Los fraternales sentimientos de hermandad profunda entre el pueblo cubano y la patria de Nelson Mandela nacieron de un hecho que ni siquiera ha sido mencionado, y de lo cual no habíamos dicho una palabra a lo largo de muchos años; Mandela, porque era un apóstol de la paz y no deseaba lastimar a nadie. Cuba, porque jamás realizó acción alguna en busca de gloria o prestigio.
Cuando la Revolución triunfó en Cuba fuimos solidarios con las colonias portuguesas en África, desde los primeros años; los Movimientos de Liberación en ese continente ponían en jaque al colonialismo y el imperialismo, luego de la Segunda Guerra Mundial y la liberación de la República Popular China el país más poblado del mundo, tras el triunfo glorioso de la Revolución Socialista Rusa.
Las revoluciones sociales conmovían los cimientos del viejo orden. Los pobladores del planeta, en 1960, alcanzaban ya los 3 mil millones de habitantes. Parejamente creció el poder de las grandes empresas transnacionales, casi todas en manos de Estados Unidos, cuya moneda, apoyada en el monopolio del oro y la industria intacta por la lejanía de los frentes de batalla, se hizo dueña de la economía mundial. Richard Nixon derogó unilateralmente el respaldo de su moneda en oro, y las empresas de su país se apoderaron de los principales recursos y materias primas del planeta, que adquirieron con papeles.
Hasta aquí no hay nada que no se conozca.
Pero, ¿por qué se pretende ocultar que el régimen del Apartheid, que tanto hizo sufrir al África e indignó a la inmensa mayoría de las naciones del mundo, era fruto de la Europa colonial y fue convertido en potencia nuclear por Estados Unidos e Israel, lo cual Cuba, un país que apoyaba las colonias portuguesas en África que luchaban por su independencia, condenó abiertamente?
Nuestro pueblo, que había sido cedido por España a Estados Unidos tras la heroica lucha durante más de 30 años, nunca se resignó al régimen esclavista que le impusieron durante casi 500 años.
De Namibia, ocupada por Sudáfrica, partieron en 1975 las tropas racistas apoyadas por tanques ligeros con cañones de 90 milímetros que penetraron más de mil kilómetros hasta las proximidades de Luanda, donde un Batallón de Tropas Especiales cubanas enviadas por aire y varias tripulaciones también cubanas de tanques soviéticos que estaban allí sin personal, las pudo contener. Eso ocurrió en noviembre de 1975, 13 años antes de la Batalla de Cuito Cuanavale.
Ya dije que nada hacíamos en busca de prestigio o beneficio alguno. Pero constituye un hecho muy real que Mandela fue un hombre íntegro, revolucionario profundo y radicalmente socialista, que con gran estoicismo soportó 27 años de encarcelamiento solitario. Yo no dejaba de admirar su honradez, su modestia y su enorme mérito.
Cuba cumplía sus deberes internacionalistas rigurosamente. Defendía puntos claves y entrenaba cada año a miles de combatientes angolanos en el manejo de las armas. La URSS suministraba el armamento. Sin embargo, en aquella época la idea del asesor principal por parte de los suministradores del equipo militar no la compartíamos. Miles de angolanos jóvenes y saludables ingresaban constantemente en las unidades de su incipiente ejército. El asesor principal no era, sin embargo, un Zhúkov, Rokossovski, Malinovsky u otros muchos que llenaron de gloria la estrategia militar soviética. Su idea obsesiva era enviar brigadas angolanas con las mejores armas al territorio donde supuestamente residía el gobierno tribal de Savimbi, un mercenario al servicio de Estados Unidos y Sudáfrica, que era como enviar las fuerzas que combatían en Stalingrado a la frontera de la España falangista que había enviado mas de cien mil soldados a luchar contra la URSS. Ese año se estaba produciendo una operación de ese tipo.
El enemigo avanzaba tras las fuerzas de varias brigadas angolanas, golpeadas en las proximidades del objetivo adonde eran enviadas, a 1 500 kilómetros aproximadamente de Luanda. De allí venían perseguidas por las fuerzas sudafricanas en dirección a Cuito Cuanavale, antigua base militar de la OTAN, a unos 100 kilómetros de la primera Brigada de Tanques cubana.
En ese instante crítico el Presidente de Angola solicitó el apoyo de las tropas cubanas. El Jefe de nuestras fuerzas en el Sur, General Leopoldo Cintra Frías, nos comunicó la solicitud, algo que solía ser habitual. Nuestra respuesta firme fue que prestaríamos ese apoyo si todas las fuerzas y equipos angolanos de ese frente se subordinaban al mando cubano en el Sur de Angola. Todo el mundo comprendía que nuestra solicitud era un requisito para convertir la antigua base en el campo ideal para golpear a las fuerzas racistas de Sudáfrica.
En menos de 24 horas llegó de Angola la respuesta positiva.
Se decidió el envío inmediato de una Brigada de Tanques cubana hacia ese punto. Varias más estaban en la misma línea hacia el Oeste. El obstáculo principal era el fango y la humedad de la tierra en época de lluvia, que había que revisar metro a metro contra minas antipersonales. A Cuito, fue enviado igualmente el personal para operar los tanques sin tripulación y los cañones que carecían de ellas.
La base estaba separada del territorio que se ubica al Este por el caudaloso y rápido río Cuito, sobre el que se sostenía un sólido puente. El ejército racista lo atacaba desesperadamente; un avión teleguiado repleto de explosivos lograron impactarlo sobre el puente e inutilizarlo. A los tanques angolanos en retirada que podían moverse se les cruzó por un punto más al Norte. Los que no estaban en condiciones adecuadas fueron enterrados, con sus armas apuntando hacia el Este; una densa faja de minas antipersonales y antitanques convirtieron la línea en una mortal trampa al otro lado del río. Cuando las fuerzas racistas reiniciaron el avance y chocaron contra aquella muralla, todas las piezas de artillería y los tanques de las brigadas revolucionarias disparaban desde sus puntos de ubicación en la zona de Cuito.
Un papel especial se reservó para los cazas Mig-23 que, a velocidad cercana a mil kilómetros por hora y a 100 —cien— metros de altura, eran capaces de distinguir si el personal artillero era negro o blanco, y disparaban incesantemente contra ellos.
Cuando el enemigo desgastado e inmovilizado inició la retirada, las fuerzas revolucionarias se prepararon para los combates finales.
Numerosas brigadas angolanas y cubanas se movieron a ritmo rápido y a distancia adecuada hacia el Oeste, donde estaban las únicas vías amplias por donde siempre los sudafricanos iniciaban sus acciones contra Angola. El aeropuerto sin embargo estaba aproximadamente a 300 —trescientos— kilómetros de la frontera con Namibia, ocupada totalmente por el ejército del Apartheid.
Mientras las tropas se reorganizaban y reequipaban se decidió con toda urgencia construir una pista de aterrizaje para los Mig-23. Nuestros pilotos estaban utilizando los equipos aéreos entregados por la URSS a Angola, cuyos pilotos no habían dispuesto del tiempo necesario para su adecuada instrucción. Varios equipos aéreos estaban descontados por bajas que a veces eran ocasionadas por nuestros propios artilleros u operadores de medios antiaéreos. Los sudafricanos ocupaban todavía una parte de la carretera principal que conduce desde el borde de la meseta angolana a Namibia. En los puentes sobre el caudaloso río Cunene, entre el Sur de Angola y el Norte de Namibia, comenzaron en ese lapso con el jueguito de sus disparos con cañones de 140 milímetros que le daba a sus proyectiles un alcance cercano a los 40 kilómetros. El problema principal radicaba en el hecho de que los racistas sudafricanos poseían, según nuestros cálculos, entre 10 y 12 armas nucleares. Habían realizado pruebas incluso en los mares o en las áreas congeladas del Sur. El presidente Ronald Reagan lo había autorizado, y entre los equipos entregados por Israel estaba el dispositivo necesario para hacer estallar la carga nuclear. Nuestra respuesta fue organizar el personal en grupos de combate de no más de 1 000 —mil— hombres, que debían marchar de noche en una amplia extensión de terreno y dotados de carros de combate antiaéreos.
Las armas nucleares de Sudáfrica, según informes fidedignos, no podían ser cargadas por aviones Mirage, necesitaban bombarderos pesados tipo Canberra. Pero en cualquier caso la defensa antiaérea de nuestras fuerzas disponía de numerosos tipos de cohetes que podían golpear y destruir objetivos aéreos hasta decenas de kilómetros de nuestras tropas. Adicionalmente, una presa de 80 millones de metros cúbicos de agua situada en territorio angolano había sido ocupada y minada por combatientes cubanos y angolanos. El estallido de aquella presa hubiese sido equivalente a varias armas nucleares.
No obstante, una hidroeléctrica que usaba las fuertes corrientes del río Cunene, antes de llegar a la frontera con Namibia, estaba siendo utilizada por un destacamento del ejército sudafricano.
Cuando en el nuevo teatro de operaciones los racistas comenzaron a disparar los cañones de 140 milímetros, los Mig-23 golpearon fuertemente aquel destacamento de soldados blancos, y los sobrevivientes abandonaron el lugar dejando incluso algunos carteles críticos contra su propio mando. Tal era la situación cuando las fuerzas cubanas y angolanas avanzaban hacia las líneas enemigas.
Supe que Katiuska Blanco, autora de varios relatos históricos, junto a otros periodistas y reporteros gráficos, estaban allí. La situación era tensa pero nadie perdió la calma.
Fue entonces que llegaron noticias de que el enemigo estaba dispuesto a negociar. Se había logrado poner fin a la aventura imperialista y racista; en un continente que en 30 años tendrá una población superior a la de China e India juntas.
El papel de la delegación de Cuba, con motivo del fallecimiento de nuestro hermano y amigo Nelson Mandela, será inolvidable.
Felicito al compañero Raúl por su brillante desempeño y, en especial, por la firmeza y dignidad cuando con gesto amable pero firme saludó al jefe del gobierno de Estados Unidos y le dijo en inglés: “Señor presidente, yo soy Castro”.
Cuando mi propia salud puso límite a mi capacidad física, no vacilé un minuto en expresar mi criterio sobre quien a mi juicio podía asumir la responsabilidad. Una vida es un minuto en la historia de los pueblos, y pienso que quien asuma hoy tal responsabilidad requiere la experiencia y autoridad necesaria para optar ante un número creciente, casi infinito, de variantes.
El imperialismo siempre reservará varias cartas para doblegar a nuestra isla aunque tenga que despoblarla, privándola de hombres y mujeres jóvenes, ofreciéndole migajas de los bienes y recursos naturales que saquea al mundo.
Fidel Castro Ruz
Diciembre 18 de 2013 - 8 y 35 p.m.
HACER POSIBLES LOS SUEÑOS Y LAS ESPERANZAS
Encontrar el camino correcto dentro de la sociedad cuando te has convertido en un eslabón perdido no es tarea fácil, sin embargo La Colmenita junto a La Red Cubana de Educadores Populares y Producciones Caminos se empeñaron en hacer reversible esta situación para algunos adolescentes con el proyecto creativo ¿Y tú qué?
Esta iniciativa consistió en la realización de una pieza teatral inspirada en las propias vivencias de sus creadores, los estudiantes de la Escuela de Formación Integral José Martí –EFI-, una institución que agrupa adolescentes con problemas conductuales y por razones diversas se han alejado de los patrones sociales.
El resultado de todo un año de trabajo fue estrenado este 18 de diciembre en el Teatro de la Orden III de La Habana Vieja en un audiovisual que, desde la historia de cada uno de esos jóvenes, invita a pensar y a hacer…hacer posibles los sueños y las esperanzas.
Los guías en este proyecto manifestaron su gratitud, reconocieron que vivir esta experiencia fue fuerte y ver su fruto, una gran satisfacción, no solo por la producción audiovisual, sino por los senderos que ya estos
muchachos han tomado- de ellos nos nutrimos con sus historias de vida y demostraron que también tienen metas que alcanzar, para lo cual hay que guiarlos-.
Los protagonistas de esta historia consideran que esa etapa de trabajo les encendió una llama para luchar por sus sueños…para nada difícil de alcanzar por el talento y el amor que emanan de sí mismos.
¿Y tú qué? Es una noble producción en la que también participó un grupo multidisciplinario de psicólogos, oficiales del MININT, esposas, esposos y amigos, cada cual con una misión, en ocasiones indefinida, pero siempre útil para la materialización de un verdadera obra social.
Texto: Yenisei García
Fotos: Héctor Planes.
Esta iniciativa consistió en la realización de una pieza teatral inspirada en las propias vivencias de sus creadores, los estudiantes de la Escuela de Formación Integral José Martí –EFI-, una institución que agrupa adolescentes con problemas conductuales y por razones diversas se han alejado de los patrones sociales.
El resultado de todo un año de trabajo fue estrenado este 18 de diciembre en el Teatro de la Orden III de La Habana Vieja en un audiovisual que, desde la historia de cada uno de esos jóvenes, invita a pensar y a hacer…hacer posibles los sueños y las esperanzas.
Los guías en este proyecto manifestaron su gratitud, reconocieron que vivir esta experiencia fue fuerte y ver su fruto, una gran satisfacción, no solo por la producción audiovisual, sino por los senderos que ya estos
muchachos han tomado- de ellos nos nutrimos con sus historias de vida y demostraron que también tienen metas que alcanzar, para lo cual hay que guiarlos-.
Los protagonistas de esta historia consideran que esa etapa de trabajo les encendió una llama para luchar por sus sueños…para nada difícil de alcanzar por el talento y el amor que emanan de sí mismos.
¿Y tú qué? Es una noble producción en la que también participó un grupo multidisciplinario de psicólogos, oficiales del MININT, esposas, esposos y amigos, cada cual con una misión, en ocasiones indefinida, pero siempre útil para la materialización de un verdadera obra social.
Texto: Yenisei García
Fotos: Héctor Planes.
EN EL 2014 SEGUIR ABRIENDO CAMINOS
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Gerardo Hernández: un mensaje a los cubanos que residen en Europa
Queridos hermanos cubanos residentes en Europa:
Hace algunas semanas Adriana participó en un encuentro de solidaridad de cubanos residentes en América Latina, que se efectuó en Brasil, y me pidió unas palabras para compartirlas con nuestros compatriotas en aquel evento.
Como ese mensaje fue escrito pensando en todos los cubanos dignos que residen fuera de la isla, me gustaría, al enviarles este saludo de fin de año en nombre de Los Cinco, compartir con ustedes algunas de aquellas ideas.
Cuando Adriana me pidió dirigirme a los compatriotas residentes en el exterior me vino a la mente una frase de José Martí que he tenido por varios años en la pared de las celdas donde he estado: "Para los fieles, vengan tarde o temprano, guarda Cuba todo su amor. Para los incapaces de amarla y servirla, basta con el olvido".
Y es que, de la misma manera en que se puede ser traidor en nuestro propio suelo, y los hay que no vacilan en denigrar y atacar a su patria a cambio de unas monedas, también se puede ser fiel a la tierra que nos vio nacer desde cualquier rincón del mundo, y es el caso de ustedes.
El pasado 12 de Septiembre se cumplieron 15 años del arresto de Los Cinco. Se dice fácil, pero las niñas que nacieron en 1998 celebraron este año sus fiestas de Quinceañera, mientras que durante todas sus vidas Los Cinco hemos vivido en una celda, lejos de la patria y de nuestros seres queridos.
Afortunadamente ya René se encuentra en Cuba. Él se ha convertido en un abanderado de nuestra batalla por la justicia, y no ha descansado ni descansará hasta que sus cuatro hermanos estemos de regreso. La reciente campaña de las cintas amarillas es solo una muestra de las iniciativas que René está impulsando, y habrán muchas otras, por lo que les pedimos que se mantengan pendientes, y que nos sigan apoyando en esta nueva etapa de la lucha desde los diferentes países donde ustedes se encuentran.
Faltan apenas unos días para que celebremos el 55 Aniversario de nuestra Revolución, y Los Cinco queremos hoy -en nombre también de nuestros familiares- desearles un muy feliz y exitoso 2014, y darles las gracias por todo lo que han hecho y seguirán haciendo por esta causa.
Sepan que la admiración y el cariño que ustedes nos han demostrado son recíprocos, porque, como también dijera nuestro Héroe Nacional: "El cubano ama a la gloria porque es capaz de ella: ama a los que pasean por el mundo la gloria de su patria".
Un fuerte abrazo a todos.
Gerardo Hernández Nordelo
Prisión Federal de Victorville
California. Diciembre 14, 2013.
miércoles, 18 de diciembre de 2013
Impresiones del Coloquio
Queridos amigos
Como siempre después de cada coloquio me gusta escribir mis impresiones — y aunque en el pasado IX Coloquio— mi participación no fue a plenitud, ya que se me presentó un problema de salud en el segundo día de estar en Holguín, lo cual me impidió participar en las actividades posteriores, pero tuve un equipo médico y paramédico encabezado por el especialista en higiene y epidermiología Alejandro Rodríguez y el doctor Carlos Mayo Zalazar que me brindaron una excelente atención, así como los compañeros del hotel Pernik donde estuve ingresada en espera de los análisis, recibiendo una atención de excelencia por parte de la licenciada Beatriz Almaguer de relaciones pública y del director de la instalación hotelera Luis Enrique Zaldina.
Gracias mil, a todas y todos los que contribuyeron a mi pronta recuperación, cuanto hicieron compensó mi doble malestar tanto físico como espiritual, además, de la entera preocupación de mis compañeros del Comité Internacional.
Aunque no tuve la oportunidad de dar a conocer el mensaje de los cubanos residentes en Europa que participaron en el VIII Encuentro en Grecia, ni tampoco de entregar a los familiares el apreciado LAZO DE CINTAS AMARILLAS que se me entregó en Atenas para
que yo llevara a Holguín, como símbolo de amor y compromiso que tenemos los cubanos amantes de la paz y la justicia por la liberación de nuestros cinco hermanos, si tuve la ocasión de encontrarme con el héroe de la República de Cuba Rene González, cuya presencia no sólo nos colmó de alegría grande, sino que elevó a rango de histórico el IX Coloquio, me estremecí—lo confieso— ante el hombre que había cumplido hasta el último día su injusta condena y, como si fuera poco, un año y medio de absurda libertad supervisada, ¡cuánta injusticia Patria mía!
Este coloquio será para mi muy especial —además— porque disfruté de la compañía de mi esposo como delegado por primera vez y de compartir momentos con el fotógrafo estadounidense Bill Hackwell, al cual le llamo: My brother, un excelente fotógrafo de documentación social y que ha sido la inspiración de mi esposo para trabajar con nosotros en el Comité Internacional.
Nos habíamos conocido hacía unos años en San Francisco, California, y supimos de su historia y sus inicios de fotógrafo en 1968 durante la guerra en Vietnam cuando apenas tenía 19 años.
Ahora con sus fotografías y documentales, a pesar del bloqueo mediático, está a la vanguardia rompiendo el muro de silencio en el caso de los cinco especialmente en el corazón del imperio bien conocido por Billi por haber nacido allí y vivir aún en dicha ciudad.
Ahora estoy de regreso en Europa, recuperada y lista para apoyar la tercera jornada en Washington, 5 Días por los 5, que es donde debemos ganar la batalla para que nuestros hermanos regresen a la Patria junto a sus seres queridos y a su pueblo que los espera con amor.
Un abrazo solidario.
Josefina Sánchez Bazán.
Como siempre después de cada coloquio me gusta escribir mis impresiones — y aunque en el pasado IX Coloquio— mi participación no fue a plenitud, ya que se me presentó un problema de salud en el segundo día de estar en Holguín, lo cual me impidió participar en las actividades posteriores, pero tuve un equipo médico y paramédico encabezado por el especialista en higiene y epidermiología Alejandro Rodríguez y el doctor Carlos Mayo Zalazar que me brindaron una excelente atención, así como los compañeros del hotel Pernik donde estuve ingresada en espera de los análisis, recibiendo una atención de excelencia por parte de la licenciada Beatriz Almaguer de relaciones pública y del director de la instalación hotelera Luis Enrique Zaldina.
Gracias mil, a todas y todos los que contribuyeron a mi pronta recuperación, cuanto hicieron compensó mi doble malestar tanto físico como espiritual, además, de la entera preocupación de mis compañeros del Comité Internacional.
Aunque no tuve la oportunidad de dar a conocer el mensaje de los cubanos residentes en Europa que participaron en el VIII Encuentro en Grecia, ni tampoco de entregar a los familiares el apreciado LAZO DE CINTAS AMARILLAS que se me entregó en Atenas para
que yo llevara a Holguín, como símbolo de amor y compromiso que tenemos los cubanos amantes de la paz y la justicia por la liberación de nuestros cinco hermanos, si tuve la ocasión de encontrarme con el héroe de la República de Cuba Rene González, cuya presencia no sólo nos colmó de alegría grande, sino que elevó a rango de histórico el IX Coloquio, me estremecí—lo confieso— ante el hombre que había cumplido hasta el último día su injusta condena y, como si fuera poco, un año y medio de absurda libertad supervisada, ¡cuánta injusticia Patria mía!
Este coloquio será para mi muy especial —además— porque disfruté de la compañía de mi esposo como delegado por primera vez y de compartir momentos con el fotógrafo estadounidense Bill Hackwell, al cual le llamo: My brother, un excelente fotógrafo de documentación social y que ha sido la inspiración de mi esposo para trabajar con nosotros en el Comité Internacional.
Nos habíamos conocido hacía unos años en San Francisco, California, y supimos de su historia y sus inicios de fotógrafo en 1968 durante la guerra en Vietnam cuando apenas tenía 19 años.
Ahora con sus fotografías y documentales, a pesar del bloqueo mediático, está a la vanguardia rompiendo el muro de silencio en el caso de los cinco especialmente en el corazón del imperio bien conocido por Billi por haber nacido allí y vivir aún en dicha ciudad.
Ahora estoy de regreso en Europa, recuperada y lista para apoyar la tercera jornada en Washington, 5 Días por los 5, que es donde debemos ganar la batalla para que nuestros hermanos regresen a la Patria junto a sus seres queridos y a su pueblo que los espera con amor.
Un abrazo solidario.
Josefina Sánchez Bazán.
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